Los 78 usuarios directos de los acueductos y Juntas de Acción Comunal de la Villa de San Diego de Ubaté y Fúquene, decidieron implementar acciones para hacer cambios de hábitos y prácticas ambientales orientados a la gestión integral del recurso hídrico, por eso y desde ahora, estas familias cosecharán lluvia durante la temporada de precipitaciones para el desarrollo de actividades domésticas y agropecuarias en época seca y empezar a sumar litros de agua captada hasta la fecha con la estrategia que en todo el Territorio CAR, la cual alcanza los 163 millones en los años 2015, 2016 y 2017.
Julián Arenas profesional de la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca – CAR, explica; “la estrategia denominada ‘Lluvias para la Vida’ incluye cinco módulos de capacitación en temas como reconociendo mi territorio, donde se hace una cartografía social de la región; cambio climático y gestión del riesgo del recurso hídrico; calidad de agua en la zona, con la toma de muestras; actividad pedagógica la cual puede ser una reforestación o recolección de residuos sólidos en ríos o quebradas y finalmente la entrega de la herramienta, la cual consiste en un tanque de mil litros, canales, bajantes y accesorios”.
La cosecha de lluvia, le permite a los beneficiarios el abastecimiento del líquido en temporadas donde, debido a la sequía, los caudales en los ríos, quebradas o nacimientos disminuyen considerablemente y se presenta un déficit de agua para actividades agrícolas, ganaderas y algunas domesticas como el lavado de ropa, implementos de cocina y pisos.
“Tenemos sectores donde no hay agua de ninguna especie, hoy podemos almacenar agua por meses mientras llegan las lluvias; a veces nos tocaba ir a las quebradas y los pocos aljibes a traer agua en cantinas, chorotes o potes para poder suplir las necesidades de la comunidad”, manifestó Eleuterio Cubillos de la vereda Chinzaque de Fúquene.
El agua de lluvia es un recurso gratuito y fácil de mantener, puede ser usado en actividades que no requieran de su consumo o ingesta, y es ideal para el riego de jardines y cultivos, además permite la reducción en las tarifas de agua potable.