Con la oposición de varios sectores de las cortes por resolver, al Gobierno del presidente Iván Duque se le acaba de aparecer un nuevo obstáculo para sacar adelante su propuesta de reforma a la justicia: el proyecto de varios congresistas del Centro Democrático, apoyado por el expresidente Álvaro Uribe, que no solo va en contravía en varios puntos con el del Ejecutivo sino que trae además artículos que encenderán polémica.
Al Congreso ya han llegado tres iniciativas: la de la ministra Gloria María Borrero; la de Cambio Radical y la del Centro Democrático. Pero esta situación, que es normal en el trámite legislativo y que normalmente se resuelve mediante la acumulación de proyectos, pone en esta oportunidad en jaque al Gobierno porque los ajustes legales y constitucionales planteados por su propio partido, el CD, hacen poco probables los consensos que se necesitan para sacar adelante una reforma que ha naufragado diez veces en los últimos 20 años.
De hecho, la propia ministra de Justicia ya anunció que el presidente Duque no apoya una de las banderas del proyecto, la eliminación de las Cortes Suprema y Constitucional para crear una especie de supercorte, el Tribunal Constitucional Supremo.
Fuente: El Espectador