El proyecto abarca el tramo que va desde la «ladrillera Santafé» hasta su desembocadura en el río Bogotá.
Esta iniciativa busca alcanzar diversos objetivos, entre los cuales se incluyen la mitigación de inundaciones, el control de vertimientos y la reducción de los impactos ambientales que han afectado a los habitantes de la región durante años.
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La necesidad de estas obras se origina en una sentencia del Consejo de Estado de noviembre de 2014. Esta decisión fue el resultado de una acción popular presentada por un ciudadano que alegó la vulneración de su derecho a un ambiente sano.
Como consecuencia, el fallo obligó a la CAR a implementar medidas que mejoren las condiciones hidráulicas del río y prevengan futuros desbordamientos, como los ocurridos en 2012 durante una ola invernal.
Además de ordenar la realización de estas obras, el Consejo de Estado exigió a la CAR y al municipio de Soacha la entrega de informes detallados sobre la situación actual del río, basados en el Plan de Manejo de la Cuenca (POMCA) del río Bogotá.
Durante el transcurso del proyecto, la CAR ha mantenido un diálogo continuo con los residentes locales. Se han llevado a cabo reuniones informativas con los propietarios y habitantes de los 650 predios adyacentes al área de intervención.
Las obras en desarrollo tienen como objetivo no solo aumentar la capacidad hidráulica del río, sino también:
- Reducción de Inundaciones: Disminuir el riesgo de desbordamientos durante períodos de intensas lluvias.
- Mejora de la Calidad Ambiental: Controlar la contaminación por vertimientos, contribuyendo a la calidad del agua.
- Seguridad para los Habitantes: Proteger a las comunidades cercanas de los desastres provocados por alteraciones en el cauce del río.
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