Los delincuentes que aterrorizaban a sus víctimas cumplen condenas por hurto y extorsión
Un importante operativo liderado por el Gaula Militar y la Policía Nacional en la cárcel La Esperanza, conocida como La Pola, en Guaduas, Cundinamarca, permitió desarticular una red criminal dedicada a la extorsión. Esta operaba desde el interior de las celdas bajo un modelo de call center, extorsionando a comerciantes de Bogotá y municipios cercanos.
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La intervención, realizada como parte del Plan Ayacucho, se llevó a cabo el 26 de septiembre de 2024. Durante el operativo sorpresa, las autoridades incautaron 27 celulares, 20 sim cards, 50 cargadores y 28 audífonos. Estos equipos eran utilizados para realizar llamadas extorsivas, simulando ser miembros de grupos criminales como el Tren de Aragua o Los Satanás.
Los reclusos exigían grandes sumas de dinero a sus víctimas, generando temor en comerciantes de Bogotá y alrededores. El brigadier general Rodolfo Morales Franco, comandante de la Décimo Tercera Brigada del Ejército, destacó que este golpe afecta las finanzas ilegales de las estructuras criminales que operan en la región.
Este caso recuerda otros operativos similares, como el desmantelamiento de una red extorsiva en la cárcel de Girardot en junio, donde se encontraron registros detallados de posibles víctimas. También se halló un call center clandestino en Sincelejo en abril.
El Inpec y las Fuerzas Militares continúan trabajando en conjunto para combatir este tipo de delitos, que afectan la seguridad de comerciantes y ciudadanos en Bogotá y Cundinamarca.