La CAR trabaja para contrarrestar los efectos de la temporada invernal.
La Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca y el Instituto de Caminos y Construcciones de Cundinamarca suscribieron un contrato de comodato que permitirá contrarrestar y fortalecer la capacidad de respuesta ante la emergencia climática que se registra en varias zonas del departamento.
Como parte de esta alianza, la CAR inició la entrega de cinco excavadoras terrestres de brazo largo al ICCU, diseñadas para realizar labores de mantenimiento vial y atender emergencias con mayor rapidez y eficiencia. Las máquinas, valoradas en más de 1.800 millones de pesos, están equipadas con tecnología GPS para garantizar un monitoreo adecuado durante su operación.
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Este convenio no solo representa una oportunidad para mejorar la infraestructura vial, sino que permite avanzar con trabajos de prevención y atención de emergencias en puntos críticos que revisten importancia por la intensificación de las lluvias de los últimos días. “Queremos disminuir los efectos en las inundaciones, poder trabajar con las comunidades y las administraciones municipales para la atención inmediata de las fuentes hidrográficas, quitando taponamientos y ampliando capacidades hidráulicas” afirmó Nidia Riaño, directora encargada de la CAR.
Jerusalén fue el municipio elegido para hacer entrega de una de las máquinas, allí la excavadora empezará los trabajos de adecuación hidráulica en la quebrada La Pauta, en donde, por la lluvia, se está perdiendo parte de la bancada, lo que pone en riesgo la vida de los habitantes aledaños a la fuente hídrica.
Con este acuerdo, la CAR y el ICCU refuerzan su alianza estratégica para promover un desarrollo sostenible que responda a los desafíos climáticos y garantice una gestión efectiva de las emergencias viales en el departamento.