
Un nuevo hecho de violencia estremeció al municipio de Madrid, Cundinamarca, la noche del pasado lunes 7 de julio. Hacia las 11:05 p.m., Brayan Narváez Cantillo, un joven de 23 años oriundo de Santa Marta, perdió la vida tras recibir una grave herida con arma blanca en el sector de La Finca, exactamente en la calle 24 #2-89 Este, dentro de un conjunto residencial.
Según los primeros reportes, Brayan sostuvo una riña con otro hombre, presuntamente de nacionalidad extranjera, quien lo atacó con un machete en el tórax, específicamente en la zona precordial. El joven, quien se destacaba por ser cristiano y llevaba puesta una camiseta del equipo Unión Magdalena al momento de la agresión, fue trasladado de inmediato al Hospital Santa Matilde. A pesar del esfuerzo del personal médico, no logró sobrevivir debido a la gravedad de la herida.
Testigos y medios locales, como La Lengua Caribe, han sugerido que el ataque pudo haber estado motivado por intolerancia, no solo personal sino también por posibles diferencias culturales o deportivas, aunque las autoridades aún no confirman esa hipótesis.
Tras el crimen, las autoridades capturaron a dos personas vinculadas con el caso, quienes fueron presentadas ante la Fiscalía URI para avanzar en su proceso de judicialización.
La Alcaldía de Madrid y la Policía del departamento rechazaron el violento episodio y reiteraron el llamado a la ciudadanía para resolver los conflictos de manera pacífica. También insistieron en la importancia de fomentar la tolerancia y el respeto en espacios comunitarios para evitar que tragedias como esta se repitan.