En sus 60 años de existencia, el viejo Hospital José María Hernández, de Mocoa, jamás había recibido tanto muerto y tanto herido junto como a partir de la medianoche del pasado viernes 31 de marzo. El deslave producido por la creciente de los ríos Mocoa, Mulato y Sancoyaco, generando flujos de lodo en varios sectores de la cabecera Mocoa que causaron la destrucción 17 barrios arrasando con cuanta vivienda, puente y vehículos topó a su paso.
Los barrios San Miguel, La Esmeralda, Laureles, El Libertador, Progreso, La Independencia, Modelo, San Antonio y San Agustín quedaron literalmente borrados del mapa de esta ciudad del Medio Putumayo que de sus 43 mil habitantes llora la muerte de más de 250 de ellos, la desaparición de 200 y padece las graves secuelas que dejó el fenómeno natural en decenas y decenas de personas.