En la zona del peaje Caiquero, los incidentes viales no dan tregua. El desprendimiento de rocas mantiene activo un contraflujo que complica la circulación y exige máxima precaución a los conductores. Las autoridades mantienen habilitado uno de los carriles en sentido contrario para aliviar la congestión mientras avanzan las labores de evaluación y control del terreno.
Durante la noche de este martes, un nuevo accidente obligó a cerrar nuevamente la carretera. Un automóvil y un tractocamión chocaron en medio del corredor vial afectado, situación que quedó registrada en el material fotográfico compartido por los equipos de emergencia. El impacto generó alarma entre los usuarios que transitaban por la zona, quienes tuvieron que detenerse y esperar instrucciones de las autoridades.
A pesar del fuerte choque, los ocupantes de los vehículos salieron ilesos. Solo se reportaron daños materiales, lo que llevó alivio a los presentes en el lugar. Sin embargo, el hecho reavivó la preocupación sobre las condiciones de seguridad en este tramo, donde el riesgo por caída de rocas aumenta la probabilidad de nuevos incidentes.
Unidades de la Policía y de la Policía de Carreteras trabajan de manera coordinada para despejar el área y organizar el flujo vehicular. Los uniformados orientan a los conductores, realizan inspecciones y coordinan el retiro de los automotores involucrados para restablecer la movilidad en el menor tiempo posible.
Las autoridades recomiendan a los viajeros planear sus desplazamientos con anticipación, conducir con precaución y estar atentos a los reportes oficiales sobre el estado de la vía. Mientras persista la inestabilidad en la montaña, el tránsito por el sector requerirá paciencia y atención constante para evitar nuevos accidentes.
