Con éxito finalizó el Festival Vive el río Bogotá, una conmemoración donde el gran invitado fue la corriente hídrica que nace en el páramo de Guacheneque en Villapinzón y finaliza entre los municipios de Ricaurte y Girardot en la provincia del Alto Magdalena, en un recorrido de 380 kilómetros por las cuencas alta, media y baja, llevando un mensaje de responsabilidad ambiental frente a su recuperación.
El río Bogotá es una deuda histórica que tienen los cundinamarqueses, bogotanos y los colombianos con la descontaminación del río, desde lo que significa su función, su determinante del ordenamiento, su enfoque de competitividad, su promoción del desarrollo turístico que a futuro sin duda se debe consolidar en múltiples acciones que desde el departamento, el distrito y la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca – CAR se ha venido liderando, por eso celebramos que este tipo de iniciativas se sigan gestionando.
Definitivamente desde la Gobernación y a través de la Secretaría del Ambiente, lo que se busca es que el río Bogotá tenga un balance entre los usos y beneficiosos para generación de energía, suministro de agua y agricultura con la conservación de los ecosistemas, la calidad del agua y la posibilidad de servicios recreativos, paisajísticos, culturales y estéticos.
Fuente: Prensa Gobernación de Cundinamarca