El pasado 26 de mayo, en horas de la noche, se presentó un lamentable hecho en las calles de Funza, Cundinamarca. Un conductor de bus arrolló a un perro que se encontraba en la esquina de un andén y, tras el impacto, huyó del lugar sin asumir ninguna responsabilidad por lo sucedido.
Testigos del incidente relataron que el animal permanecía tranquilo en la esquina cuando el vehículo lo embistió sin reducir la velocidad. Lo más indignante, según quienes presenciaron el hecho, es que el conductor no se detuvo a auxiliar al perro ni a verificar su estado, sino que continuó su marcha sin mostrar ningún tipo de empatía.
Vecinos y defensores de los animales rechazan con firmeza este acto de crueldad y exigen justicia. Además, hacen un llamado a la comunidad para identificar al responsable y denunciarlo ante las autoridades competentes. Cualquier información que permita dar con el paradero del conductor resultará clave para que este caso no quede impune.
“¡Por favor, si lo ven, denúncienlo!”, pidieron los residentes del sector a través de redes sociales.
Este hecho pone en evidencia la necesidad urgente de fortalecer la educación sobre tenencia responsable y respeto por los animales, así como de aplicar sanciones ejemplares a quienes los maltratan o atropellan deliberadamente.
La comunidad de Funza espera una pronta reacción de las autoridades y reitera su compromiso con la protección de los seres sintientes. El silencio ante este tipo de actos solo alimenta la indiferencia y normaliza la violencia.
