
La empresa estatal Ecopetrol anunció esta semana el inicio del proceso de licitación para construir una planta de regasificación en su terminal marítima de Coveñas, con el objetivo de fortalecer la infraestructura energética del país.
El proyecto contempla instalar una unidad flotante de almacenamiento y regasificación (FSRU, por sus siglas en inglés), con capacidad para recibir importaciones de gas natural licuado (GNL). A partir del 14 de octubre, la empresa estatal abrirá la recepción de ofertas vinculantes, y espera adjudicar el contrato en un lapso aproximado de un mes.
Se proyecta que la obra entre en operación durante el primer trimestre de 2027, y que pueda suministrar hasta 400 millones de pies cúbicos diarios de gas para atender la demanda nacional. Este aporte energético deberá apoyar industrias, distribución doméstica y generación eléctrica.
Según el anuncio, alrededor de veinte compañías han mostrado interés en participar en la licitación. Ecopetrol ya cuenta con la aprobación financiera para ejecutar el proyecto, lo cual demuestra la apuesta del gobierno por diversificar las fuentes energéticas del país.
Este plan forma parte de una estrategia mayor del Estado para reducir la dependencia de combustibles fósiles tradicionales y garantizar suministro energético seguro, sobre todo en regiones apartadas. Las autoridades esperan que el nuevo sistema contribuya a estabilizar los precios del gas y promueva inversiones en sectores industriales.
Mientras tanto, analistas energéticos advierten que el éxito del proyecto dependerá de factores como la eficiencia en la ejecución, la capacidad logística, la regulación de precios y la integración con la red nacional. Además, será clave monitorear cómo se acomoda al contexto ambiental y las normas de seguridad marítima en la zona de Coveñas.