Entre 2.500 y 3.000 habitantes de Tocancipá ingresan mensualmente al servicio de urgencias del puesto de salud municipal –una pequeña casa colonial junto a la Alcaldía– y gran parte de ellos deben ser remitidos a Sopó con el fin de que reciban atención.
Este es el drama que viven en esta población, porque el hospital municipal, que arrancó su construcción en el 2009 y al que se le invirtieron más de $ 6.000 millones, se entregó en el 2015 pero quedó terminado en un 65 por ciento.
“Por fuera se ve casi lista, pero por dentro no hay mobiliario, ni mampostería, ni redes en algunas zonas, por lo que no puede entrar en funcionamiento”, explicó el secretario de Salud de Tocancipá, Willman Contreras Matheus.
La Contraloría de Cundinamarca está indagando por qué ocurrió el incumplimiento del contrato, mientras que el alcalde de esa población, Walfrando Forero, quien repite administración, destinó más de $ 9.000 millones para culminar la obra, que comenzó en el 2009, durante su primer periodo de gobierno en el municipio.
“Tocancipá es uno de los pocos territorios en los que su población no nace aquí, porque no tenemos ni siquiera sala de partos”, sostuvo el secretario Contreras.
Según explicó, en febrero se espera realizar la adjudicación del contrato para finalizar la obra, que deberá quedar lista a finales del 2017. “En el 2018 entraría a funcionar, una vez la Gobernación de Cundinamarca dote al hospital de los equipos. Ya hay compromiso de parte del gobernador, y para el 2018 estarían llegando los instrumentos”, señaló Contreras.
Los habitantes de Tocancipá esperan con ansias este complejo centro de salud, que tendrá 9 salas de consulta externa, 3 de odontología, 5 consultorios de urgencias y 10 camas para hospitalización.
En Zipaquirá
En esta población se vive una situación similar. En el 2010 se inició la obra del hospital de nivel 4, y proyectaba acabarse en 3 años.
Una demora en la construcción durante la administración pasada llevó a que se detuviera entre el 2012 y el 2014. Según indicó la Contraloría de Cundinamarca, en una visita que realizó en octubre del 2016, se habían invertido $ 44.000 millones en la inconclusa obra.
Por esa razón, a finales de diciembre pasado, el Ministerio de Salud y la Gobernación de Cundinamarca anunciaron la inyección de $ 21.000 millones para concluirla y ponerla en funcionamiento hacia principios del 2018.
El centro de salud incluirá importantes servicios como oncología, gastroenterología, ortopedia y rehabilitación física, laboratorio clínico e imágenes diagnósticas, entre otros, pues hoy, para recibir estos servicios, los zipaquireños deben viajar a Bogotá.
