El 45% de los municipios del Territorio CAR se han visto afectados por desabastecimiento de agua en los últimos 30 años, por lo que una de las apuestas más fuertes de la Corporación, ha consistido en la puesta en marcha de los Bancos Municipales de Agua, -BAMAS, sistemas integrales de captación, almacenamiento y uso de aguas lluvia y corrientes superficiales, que permitan con ello la regulación de la escorrentía superficial en la temporada de lluvias, en el marco de las iniciativas de adaptación y mitigación a los efectos del cambio climático.
Según las últimas cifras recopiladas por Empresas Públicas de Cundinamarca S.A. ESP, entre 2011 y 2014 fue necesario destinar más de 12.500 millones de pesos para motobombas, obras civiles, carrotanques entre otros, con el fin de atender las diferentes acontecimientos que se presentaron en los municipios de la jurisdicción.
Así mismo, entre 2015 y 2016, la ESP reportó la atención de emergencias presentadas en cuatro municipios que fueron declarados en calamidad pública y 39 municipios en emergencia por desabastecimiento parcial de agua, con una inversión que superó los 3 mil millones de pesos en el traslado y uso de carrotanques.
Es por esto que la Autoridad Ambiental ha priorizado la necesidad de implementar estas estructuras en el territorio, especialmente en aquellas municipalidades que históricamente se han visto afectadas por el desabastecimiento. Actualmente y gracias a la iniciativa de la CAR, 14 municipios están implementando su BAMA para contrarrestar las fuertes épocas de sequía y garantizar el suministro de agua a la población, beneficiando a cerca de 22 mil personas.
Actualmente, en los municipios de Granada, Pacho, Susa, San Miguel de Sema, Guacheta, Chiquinquirá, Buenavista y Jerusalén las obras ya finalizaron y se encuentran en monitoreo por parte de la Corporación, con el fin de identificar su correcta operación, teniendo en cuenta que las estructuras están cubiertas por una geomembrana que ayudará a prevenir las infiltraciones sobre el vaso. Cada BAMA tendrá una capacidad de llenado de 10 mil m3 a excepción de Jerusalén, que contara con un volumen de 5.600 m3. Tibacuy, Pandi, CaparrapÍ, Pasca y Silvania se encuentran en proceso de construcción.
Los impactos y beneficios de la implementación de estos sistemas son enormes, entre ellos se encuentran: la integración comunitaria, pedagogía sobre la protección y conservación del recurso hídrico, regulación de la oferta, excedentes en épocas de bajos niveles, así como beneficios económicos por disponibilidad del recurso a poblaciones vulnerables para las actividades de riego, producción agrícola y pecuaria.
La entidad hace un llamado especial a las autoridades municipales, especialmente a aquellas que presentan alto grado de desabastecimiento, para que se vinculen a este proyecto y puedan responder eficazmente emergencias y contingencias que traen consigo la temporada seca.
Es de resaltar que el Consejo Directivo de la CAR determinó los BAMAS como proyecto estratégico para los próximos 10 años, tiempo durante el cual la entidad deberá apropiar recursos para ampliar el campo de cobertura de esta estrategia en toda la jurisdicción.
Fuente: Prensa CAR