
En el corazón de Guatavita, uno de los municipios más turísticos de Cundinamarca, se levanta una de las atracciones más curiosas y fotografiadas de Colombia: La Casa al Revés, una construcción que literalmente está puesta patas arriba. Su techo toca el suelo, los muebles cuelgan del “techo” y cada rincón parece sacado de una película surrealista.
Este innovador proyecto nació como una propuesta de turismo experiencial que combina creatividad, arte y diversión. Desde su apertura, se ha convertido en uno de los lugares más visitados del altiplano cundiboyacense, atrayendo a miles de turistas que buscan una foto diferente y una experiencia fuera de lo común.
En el interior, los visitantes pueden recorrer habitaciones completamente invertidas —la sala, la cocina, los dormitorios e incluso el baño—, todos decorados con detalle para dar la sensación de estar caminando sobre el techo. El diseño desafía la percepción y estimula la imaginación, convirtiéndose en un espacio ideal para la fotografía, el humor y la sorpresa.
Además de la casa principal, el complejo cuenta con zonas verdes, miradores hacia la laguna y un café temático donde se pueden degustar bebidas locales. La Casa al Revés no solo es un punto de diversión, sino también un ejemplo de cómo el turismo creativo está transformando la oferta turística de Cundinamarca, posicionando a Guatavita como uno de los destinos más innovadores de la región.




























