A solo una hora y media de Bogotá, el municipio de Suesca se alza como uno de los destinos más atractivos para los amantes de la naturaleza, la escalada y la tranquilidad. Este encantador pueblo cundinamarqués guarda un tesoro que atrae tanto a turistas nacionales como extranjeros: las Rocas de Suesca, una formación de piedra arenisca de más de 4 kilómetros de largo y hasta 120 metros de altura, considerada la cuna de la escalada en Colombia.
El lugar ofrece múltiples opciones para quienes buscan una experiencia económica. Los visitantes pueden recorrer senderos ecológicos, acampar junto al río Bogotá, practicar ciclismo o disfrutar de una tarde de picnic rodeados de un paisaje imponente. Muchos aventureros llegan en tren turístico desde la estación de La Sabana o en buses intermunicipales que salen desde el norte de Bogotá por un costo aproximado de $10.000 pesos.
Los escaladores más experimentados encuentran en estas paredes naturales más de 400 rutas de ascenso con diferentes niveles de dificultad, mientras que los principiantes pueden tomar clases guiadas por instructores locales a precios accesibles. Además, la zona cuenta con pequeños restaurantes y tiendas que ofrecen platos típicos como el ajíaco, la trucha y las arepas boyacenses, sin superar los $20.000 pesos por persona.
Suesca también conserva su esencia rural. Sus calles empedradas, su iglesia colonial y la calidez de sus habitantes crean una atmósfera acogedora que invita a desconectarse del ruido de la ciudad. Al caer la tarde, el atardecer ilumina las rocas con tonos dorados, regalando una vista perfecta para los amantes de la fotografía.
El municipio trabaja actualmente en promover un turismo sostenible, incentivando el cuidado de los ecosistemas y la reducción de residuos. “Queremos que quienes vengan disfruten, pero también cuiden este lugar que es parte de nuestra identidad”, expresó Sandra López, guía local y promotora ambiental.
Visitar Suesca no requiere grandes presupuestos, solo ganas de explorar, caminar y respirar aire puro. Con poco dinero, los viajeros pueden vivir una experiencia completa que mezcla aventura, historia y naturaleza.
