
En el páramo de Rabanal, jurisdicción de Lenguazaque (Cundinamarca), fueron suspendidas actividades mineras ilegales por parte de la Corporación Autónoma Regional (CAR) en coordinación con el Ejército Nacional, la Fuerza Aeroespacial Colombiana y la Policía.
La intervención fue desarrollada tras ser recibidas denuncias de la comunidad sobre la extracción de carbón sin permisos ambientales. En el operativo, fueron identificados puntos de explotación que se encontraban activos y que estaban afectando zonas de recarga hídrica.
Equipos y herramientas utilizados para la minería fueron decomisados y puestos a disposición de las autoridades competentes. El daño ambiental fue evaluado por peritos de la CAR, quienes establecieron que la actividad había causado alteraciones en el suelo, la vegetación y las fuentes de agua.
Se destacó que, debido a la ubicación estratégica del páramo, su conservación resulta fundamental para el abastecimiento de agua potable en varias provincias de Cundinamarca y Boyacá. Por esta razón, la acción conjunta fue considerada de alto impacto en la protección de ecosistemas estratégicos.
La comunidad fue convocada a participar en procesos de vigilancia ambiental y a denunciar cualquier actividad que ponga en riesgo la biodiversidad. Asimismo, fueron anunciadas jornadas de restauración ecológica que incluirán la siembra de especies nativas y el monitoreo de nacimientos de agua.
La CAR reiteró que la minería en zonas de páramo está prohibida por la ley colombiana y que todo proyecto minero debe cumplir estrictamente con licencias y estudios ambientales previos. Este caso ha sido registrado como un ejemplo de cooperación interinstitucional para la defensa del medio ambiente en Cundinamarca.