Se aseguró una disponibilidad aceptable de recursos hídricos para la capital
La Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca ha reportado una estabilidad en los niveles de agua en los embalses que abastecen a gran parte de Bogotá. El sistema general Chingaza (El Hato) mantiene un promedio del 49,88% en su capacidad.
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Este informe resulta crucial para los habitantes y autoridades, ya que proporciona datos clave para evaluar y planificar el manejo de los recursos. Con esta actualización, se pueden establecer medidas preventivas y de conservación para asegurar el abastecimiento hídrico en los próximos meses.
En el agregado norte, compuesto por los embalses de Chisacá y Regardera, se registró una capacidad del 53,73%, mientras que el agregado sur, con los embalses de Chuza y San Rafael, presenta un incremento del 93,14%, reflejando el impacto positivo de las lluvias recientes.
Asimismo, el embalse de Neusa alcanza un 76,05% de su capacidad, el de Sisga un 64,36%, y el de Tominé un 49,03%. Estos niveles de almacenamiento muestran una tendencia de recuperación sostenida.
A pesar de estos aumentos, el monitoreo continuo es necesario para mantener la estabilidad del suministro a mediano y largo plazo, especialmente en reservas clave en embalses de Cundinamarca como Chingaza, Tominé y Neusa.
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