Desde Santa Cecilia, jurisdicción del municipio de Paratebueno, El Gobernador, Jorge Rey realizó un balance preliminar de los graves daños ocasionados por los recientes movimientos sísmicos que afectaron el oriente de Cundinamarca. La situación en la provincia es crítica, y el trabajo conjunto no se detiene.
En Paratebueno se reportan 250 viviendas afectadas, entre ellas varias con daños estructurales severos. Seis instituciones educativas —incluida la escuela de Santa Cecilia— presentan afectaciones importantes, al igual que una iglesia del sector. Además, se identificaron cinco puntos críticos sobre la vía nacional operada por Covioriente y múltiples derrumbes en las rutas que conectan Santa Cecilia con Santa Inés y Santa Teresa.
En el municipio de Medina, los daños también son significativos: 100 viviendas resultaron afectadas, de las cuales 45 colapsaron por completo. Nueve escuelas y tres iglesias sufrieron daños, y la vía principal de acceso al municipio presenta afectaciones que dificultan la movilidad.
Junto al Gabinete Departamental, los organismos de socorro y autoridades locales, avanzan con censos poblacionales, entrega de ayudas humanitarias y acompañamiento psicosocial a las familias. La prioridad es brindar atención inmediata y apoyar la recuperación de los sectores más golpeados.
Con el apoyo de Enel Colombia, se instalaron siete plantas eléctricas para restablecer el servicio en Santa Cecilia, Nuevo Horizonte y Japón. Además, se trasladó maquinaria amarilla del ICCU para intervenir las vías rurales y ejecutar obras de mitigación del riesgo.
La Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) suministra agua mediante carrotanques, y la Unidad Departamental entrega kits de aseo y alimentos no perecederos.
