La Gobernación de Cundinamarca anunció una importante mejora en materia de seguridad: durante el último año, las autoridades lograron reducir más de 3.000 delitos en todo el departamento. Las cifras reflejan el impacto de los operativos adelantados por la Policía Nacional, el Ejército, la Fuerza Aérea y la Fiscalía, en coordinación con la administración departamental.
Según el balance oficial, el número total de delitos pasó de 48.529 a 45.535 casos, lo que representa una disminución significativa en la mayoría de los municipios. Las autoridades destacaron la desarticulación de 57 estructuras criminales dedicadas al microtráfico, la extorsión y el hurto, además de la captura de más de 8.000 personas vinculadas a distintas actividades delictivas. En los operativos también se incautaron más de 700 armas de fuego.
Los mayores avances se registraron en delitos como hurto a personas, vehículos y viviendas, así como en casos de estafa y lesiones personales. Las estrategias de prevención, el uso de herramientas tecnológicas y la presencia constante de la Fuerza Pública en zonas críticas contribuyeron a estos resultados.
El gobernador de Cundinamarca resaltó que la articulación entre instituciones permitió actuar de manera más rápida y eficaz frente a las redes criminales. “Cada operativo demuestra que cuando trabajamos juntos, los resultados llegan”, señaló durante la presentación del informe.
A pesar de los avances, las autoridades mantienen la atención sobre problemáticas que aún preocupan, como la violencia intrafamiliar y los delitos sexuales. La administración departamental planea reforzar los programas de prevención y educación ciudadana para consolidar la seguridad en todo el territorio.
Con estos resultados, Cundinamarca se posiciona entre los departamentos con mayor reducción de delitos en el país y avanza hacia el objetivo de convertirse en una región más segura y tranquila para sus habitantes.
