Se definieron zonas criticas por causa de las fuertes lluvias que enfrenta el país.
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha declarado oficialmente una situación de desastre natural en todo el país. Como respuesta a las crecientes vulnerabilidades territoriales exacerbadas por fenómenos climáticos imprevisibles. Esta medida busca enfrentar los efectos de la crisis climática, cuyos impactos se han visto intensificados por prácticas como la deforestación y las economías ilícitas, que agravan aún más la situación.
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En particular, la urbanización acelerada en Bogotá y la expansión sobre la sabana también han incrementado los riesgos en la región capitalina. El anuncio se realizó tras una reunión estratégica encabezada por el presidente Petro en el PMU, en la Sala de la UNGRD en Bogotá.
Durante el encuentro, se evaluaron los efectos de las lluvias intensas que han afectado a diversas regiones del país. Como resultado de esta evaluación, el mandatario definió tres zonas como prioritarias para la atención inmediata: Alta Guajira, Chocó y Bogotá. Áreas que están enfrentando dificultades críticas, como la escasez de agua potable.
Además, Petro advirtió que este fenómeno climático en Colombia podría generar nuevas urgencias en otras regiones, como ya se está observando en Santander, donde se han registrado signos de alarma debido a las inclemencias del tiempo.
Se espera que la situación de desastre persista hasta al menos diciembre. Con el objetivo de permitir el uso flexible de recursos presupuestales, lo que permitirá redirigir fondos de diferentes entidades del Estado hacia las zonas más afectadas.
Con esta declaración de desastre, el gobierno colombiano busca activar mecanismos de respuesta rápida para mitigar los efectos de la crisis y fortalecer la resiliencia del país ante fenómenos climáticos cada vez más frecuentes e intensos.
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